Introducción:

A. Este salmo 4, pertenece a la categoría de “lamentación individual”.

B. Este salmo es compañero del Salmo 3. Ambos se escribieron con el mismo contexto. Salmo 3, se escribe en momento de intranquilidad y sosiego y Salmo 4 indica un período de tranquilidad y paz.

e-Sword En paz me acostaré y así también dormiré, Porque solo Tú, SEÑOR, me haces vivir seguro. Salmo 4:8 NBLA

C. Tiene el siguiente esquema:

  1. Introducción (normalmente una llamada a Dios)
  2. El lamento (especificación de los sufrimientos)
  3. Apelación a Dios (una expresión de confianza en Dios)
  4. Petición (socorro)
  5. Alabanza (a pesar del sufrimiento Dios es digno de ser alabado)

D. Debe de entenderse que los levitas son las personas encargadas de hacer las oraciones en el templo, por ende, la presunción es que David escribió este salmo, y que lo pretendía para el culto vespertino; pero ¿en qué ocasión?, ¿él lo escribe? y ¿para quién? ¿Lo escribió para sí mismo, cuando estaba huyendo de Absalón?, como algunos suponen; o ¿lo escribió él para un levita para el culto vespertino ordinario?.

I. Un llamado a Dios. Salmo 4:1-2

A. Oración Salmo 4:1. El salmo inicia con un clamor introductorio pidiendo a Dios que escuche su oración. Respóndeme (en imperativo) de hecho está en tiempo perfecto. Dios había librado al salmista; por ejemplo, le había proporcionado alivio en medio de su angustia. Por eso, dirigía su oración a ese mismo Dios.

B. Se identifica los enemigos Salmo 4:2. Se hace un contraste con el Salmo 4.1, de la condición del justo y el impío. “¿hasta cuándo cambiarán mi honra en deshonra?”

II. Exhortación del salmista a la justicia. Salmo 4:3-5

A. Exaltación al servicio. David estaba seguro en el cuidado de Dios, y Jehová oiría y respondería a sus oraciones.

B. Los sacrificios de justicia aceptables resultarían cuando depositan su confianza en Jehová, porque serían ofrecidos con un espíritu correcto (Dt. 33:19; Sal. 51:19). Exhortación a ofrecer sacrificio justo. Salmo 4:5.

  1. Si Absalón estaba en la mente de David, entonces el salmista se estaba refiriendo aquí a los sacrificios vanos por lo que Absalón y sus seguidores trataban de legitimizar su causa (2 S. 15:12). Pero un hombre de fe se rendiría obediente a Dios.

III. Confianza del salmista en la tranquilidad de su vida. Salmo 4:6-8

A. En cuanto a sus enemigos David pide tener una comunión más íntima con Dios, Salmo 4:6. Y el resultado es que se encuentra el coraje para enfrentar sin miedo a sus enemigos, ¡aunque le rodeen diez millares de gente!

  1. ¿Quién nos mostrará el bien? fue pedir una bendición (Nm. 6:24–26).
  2. David pidió: Alza sobre nosotros, oh Jehová, la luz de tu rostro (por ejemplo, que derramara su favor; Sal. 31:16; 44:3; 67:1; 80:3, 7, 19; 119:135)

B. Su oración se expresa en gozo y pas, Salmo 4:7-8. El gozo y la paz verdaderos no dependen de las circunstancias, sino de la protección y provisión de Dios (Gá. 5:22; Ro. 14:17).

  1. En el heb. tiene un adverbio: me acostaré y en seguida dormiré, porque vive en la plena confianza que Dios lo cuida y lo guía. La situación de angustia motivó el salmo, y el salmo aumentó la fe del salmista.
  2. “me sostendrá”, como si fuese su lenguaje o su pensamiento en el momento de acostarse, y la razón de su sosiego.
  3. Asegurado de la protección de Jehová, el salmista se acuesta y duerme. Es el sueño más dulce, un regalo de Dios a quienes confían en Él en medio de las circunstancias más angustiosas de la vida.

Conclusión

A. Líbrame del deseo de ser alabado. La alabanza de los hombres es pura falsedad.

B. Líbrame del deseo de ser preferido a otros.

C. Líbrame del temor de ser censurado. El temor a la crítica es una de las cosas más difíciles de afrontar.

D. Líbrame del temor de ser olvidado.

Bibliografía

  1. Walvoord, J. F., & Zuck, R. B. (2000). El conocimiento bíblico, un comentario expositivo: Antiguo Testamento, tomo 4: Job-Cantar de los Cantares (p. 116). Ediciones Las Américas, A.C.
  2. Carro, D., Poe, J. T., Zorzoli, R. O., & Editorial Mundo Hispano (El Paso, T. . (1993–). Comentario bı́blico mundo hispano: Salmos (1. ed., p. 74). Editorial Mundo Hispano.

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